LA QUÍMICA VERDE

23/08/2022

Asegurar la perpetuación de nuestra civilización implica plantearnos muchas cuestiones sobre la forma en que nos relacionamos con el planeta y nos abastecemos.

 
Resultar lo menos nocivos posible para nuestro ecosistema se ha convertido en un reto que las naciones hace años que persiguen. Un reto científico, tecnológico y social
Ser humano, desarrollo y progreso están estrechamente ligados a la química en todos sus usos. La química es un fenómeno natural que el hombre ha aprendido a dominar para su interés. Del hombre depende que este uso sea más o menos perjudicial para sí mismo y para su hábitat. Equilibrar la interfase efectividad/salubridad es un requerimiento obligatorio y exigible ya en muchos países.

Naciones Unidas, redactó en 1992 la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, (basada en la Declaración de Estocolmo de 1972). En esta declaración se establecen una serie de principios, para ser seguidos por todos los agentes sociales y económicos, a nivel mundial, entendiendo el planeta como el máximo Bien Común. El objetivo: conseguir una alianza global, que, a través de la cooperación entre los estados, permita asegurar la integridad de nuestro sistema ambiental.


Si quieres conocer el documento íntegro de la Declaración de Río de 1992 y el Programa 21 pincha el siguiente enlace, es muy interesante:
Declaración de Río sobre Medio Ambiente y Desarrollo

Principio 1
Los seres humanos constituyen el centro de las preocupaciones relacionadas con el desarrollo sustentable. Los seres humanos tienen derecho a una vida saludable y productiva en armonía con la naturaleza
.

 
En el ámbito que nos compete, que es el mundo de la química, nos hacemos eco de las medidas que se tomaron por parte de diferentes comunidades, tanto a nivel local como internacional, (industria química, gobiernos, organizaciones no gubernamentales, etc.), para encaminarse hacia la transformación que exigía el desarrollo sostenible. La comunidad internacional se sumó, entonces, a la iniciativa canadiense Responsible Care cuyo objetivo principal se define de la siguiente manera: 
Lograr que las empresas adheridas se comprometan con la mejora constante, en el desarrollo de sus actividades, en Seguridad, Protección de la Salud, Medio Ambiente y Comunicación abierta y honesta, de acuerdo con los principios del Desarrollo Sostenible.
La Asociación Española del Comercio Químico es la encargada de gestionar el programa Responsible Care para Distribuidores de Productos Químicos en España, [basado en el Programa Responsible Care de Fecc (European Association of Chemical Distributors) que, a su vez, se basa en los 8 Principios Guía de ICCTA (International Council of Chemical Trade Associations)].
Sugerimos que cada persona indague a través de los medios digitales hasta allá donde le exija su curiosidad, nosotros os proponemos estos otros links y os dejamos un resumen de los principios de la Declaración de Río.

Asociación Española del Comercio Químico
Química Sostenible: Naturaleza, fines y ámbito - Ramon Mestres
Química verde: un nuevo enfoque para el cuidado del medio ambiente - María del Carmen Doria Serrano
1. Prevención
Es preferible evitar la producción de un residuo que reciclarlo, tratarlo o disponer de él una vez que se haya formado.

2. Economía atómica
Los métodos de síntesis deberán diseñarse de manera que se incorporen al máximo los reactivos en el producto final, minimizando la formación de subproductos, lo que favorece también al principio 1.

3. Uso de metodologías que generen productos con toxicidad reducida
Siempre que sea posible, los métodos de síntesis deberán diseñarse para utilizar y generar sustancias que tengan poca o ninguna toxicidad, tanto para el hombre como para el medio ambiente.

4. Generar productos eficaces, pero no tóxicos
Los productos químicos deberán ser diseñados de manera que mantengan la eficacia a la vez que reduzcan su toxicidad.

5. Reducir el uso de sustancias auxiliares
Se evitará, en lo posible, el uso de sustancias que no sean imprescindibles (solventes, reactivos para llevar a cabo separaciones, etc.) y en el caso de que se utilicen, que sean lo más inocuos posible.

6. Disminuir el consumo energético
Los requerimientos energéticos serán catalogados por su impacto medioambiental y económico, reduciéndose todo lo posible.
El desarrollo de métodos que cumplan con este principio ha llevado al desarrollo de metodologías que

7. Utilización de materias primas renovables
Las materias primas han de ser preferiblemente renovables en vez de agotables, siempre que sean técnica y económicamente viables.

8. Evitar la derivatización innecesaria
Se evitará en lo posible la formación de derivados (grupos de bloqueo, de protección/desprotección, modificación temporal de procesos físicos/químicos).

9. Potenciación de la catálisis
Se emplearán catalizadores (lo más selectivos), reutilizables en lo posible, en lugar de reactivos estequiométricos.

10. Generar productos biodegradables
Los productos químicos se diseñarán de tal manera que al finalizar su función no persistan en el medioambiente, sino que se transformen en productos de degradación inocuos.

11. Desarrollar metodologías analíticas para la monitorización en tiempo real
Las metodologías analíticas serán desarrolladas para permitir el monitoreo y control en tiempo real de los procesos, previo a la formación de productos secundarios.

12. Minimizar el potencial de accidentes químicos
Se elegirán las sustancias empleadas en los procesos químicos de forma que se minimice el riesgo de accidentes químicos, incluidas las emanaciones, explosiones e incendios.

IPL está históricamente comprometida con la sostenibilidad y la seguridad individual, contando desde sus inicios con una política de empresa coherente y totalmente involucrada con la sociedad. Los férreos valores de honestidad, respeto y solidaridad nos han guiado por el camino de las buenas prácticas, aplicando desde los inicios de la compañía la mayoría de estos principios y fomentando su aplicación entre las empresas asociadas a nuestra marca.